En Londres, lleno de gente y caro, la pareja Gemma y Kieran, con problemas de liquidez, abren su pequeño departamento a una tercera persona. De alguna manera, su nueva incorporación, Ray, hace que el piso parezca más grande, no más pequeño. Gradualmente, muchas cosas se vuelven más fáciles, más agradables y mejores con un par de manos adicionales.