Souta necesita regresar a Tokio con urgencia, pero no puede dejar solo a Poco. ¿Qué va a hacer excepto llevarse al chiquillo con él? Naturalmente, cuando entran a la oficina, Poco se convierte en el centro de atención. Souta le ruega a su jefe una extensión de sus vacaciones, aún sin saber qué hacer. Quiere trabajar, pero ¿y Poco? Preocupado, no se da cuenta de que algo anda mal con Poco...