Terminada la guerra de Secesión norteamericana (1861-1865), un grupo de soldados sureños, prisioneros en el fuerte Haukes, logra escapar. De su captura se encargará el mayor Wolcott, que obedece la orden a regañadientes, puesto que, finalizada la contienda, le parece inútil la masacre que se verá obligado a ejecutar. (FILMAFFINITY)